domingo, 14 de noviembre de 2010

La piedra y el deseo

Había una vez, hace varios años, una cartera llamada Ana. Todos los días se dirigía a cada buzón de la ciudad y le entregaba las cartas a cada vecino. El sueño de Ana era ser actriz, actuaba fenomenal y le encantaban las películas cómicas. En la esquina de una calle había una casa abandonada durante muchos años. Un buen día una familia decidió comprarla, ya que era muy grande. La familia era muy rara; todos los días se los pasaban encerrados en casa y sólo comían verduras. Un día cuando Ana la cartera se dedicaba a hacer su reparto diario en bicicleta, su rueda hizo un ruido muy raro. Se paró para ver lo que era y ¿cuál fue su sorpresa? Una piedra multicolor estaba en el suelo. Ana muy sorprendida por aquella piedra se la metió en su bolsillo y siguió con su reparto. Al llegar a su casa alguien le esperaba. Era un sabio de aspecto extraño y muy desaliñado. Ana estaba asustada pero el sabio venía para ayudarla. Le explicó que esa piedra existía hace muchos años y había pasado de familia en familia. Ana descubrió que esa piedra venía de esa familia tan rara. El sabio le dijo que esa piedra podía concederle el deseo que ella quisiera. Para poder convertir su deseo en realidad tenía que dirigirse al gran álamo de la ciudad a las doce de la noche un sábado. Ana cumplió con lo que había dicho el sabio y se dirigió al álamo. Cuando estaba junto al árbol decidió ser actriz durante el resto de su vida. Y así fue su deseo. Fue actriz durante muchos años e hizo muchas películas.

Carolina PP

8 comentarios:

loa dijo...

muy guay pero un poco larga

caro dijo...

hola os gusta ponerme comentarios por favor

MARTA dijo...

es muy bonita y aventurera me encanta lo del gran alamo me suena misterioso

Atlántico Hockey dijo...

me gusto bastante bueno mola

Unknown dijo...

muy chula

caroguay dijo...

a que si

Anónimo dijo...

hola por fav r
que los anonimos poingan sunombre

Anónimo dijo...

q chula anonimo de la eso