Pesadilla

Era de noche. La oscuridad me envolvía. El viento silbaba. La niebla era densa. Había un silencio sepulcral. Yo me retorcía en la cama soñando mi pesadilla. Era de día. Estaba en un sitio muy raro. Estaba en un bosque. Todo era muy distorsionado. El bosque era muy grande. Yo estaba en el bosque. De repente oí una voz. Esa voz era muy grave.No recuerdo exactamente lo que dijo. Esas palabras me retumbaban en mi cabeza. No era capaz de moverme. De repente apareció una bici a mi lado. La imagen cambió. Ahora estaba en un sitio mitad Plaza de la Estrella y mitad bosque de Beade. La voz sonó más fuerte. Entonces se me apareció. Era el Lobo Feroz de los Tres Cerditos, en aquellos tiempos mi libro favorito. Era la imagen más terrorífica del libro.


Tenía una cara enloquecida, con la lengua hacia afuera. Parecía estar muy cerca, aunque yo sabía que no era verdad. Tenía un sombrero muy estrafalario, unos ojos enormes y una boca que no veas. De repente se lanzó a por mí. Me surgió el pánico. Me intenté montar en la bici. Justo a tiempo. La cogí e intenté escapar a todo gas, pero me falló el pedal. Casi me pilla pero conseguí escapar. Muerto de miedo pero lo conseguí. Entonces me desperté. Estaba sudoroso. Tenía el corazón acelerado. Me pareció muy raro, pero recobré la calma y me volví a acostar. Me quedé profundamente dormido. Y aquí termina mi pesadilla.


Martín CD